El miércoles 7 de febrero los proyectos Vincles y Minúscula del barrio del Raval de Barcelona recibieron la visita de Lara Concellón, ondontopediatra y profesora del Màster d’Odontopediatri de la Universitat de Barcelona, acompañada de Sofia, alumna suya.
Se trata de una sesión de prevención en salud dental que se realiza dos veces al año por iniciativa de Lara, que es voluntaria desde hace más de ocho años del Casal dels Infants (catualmente forma parte del equipo de la Unitat d’Escolarització Compartida).
Entre ambas ofrecieron una charla a los niños y niñas de 0 a 3 años y sus madres sobre la prevención en la salud dental de las criaturas, repasando aspectos como los hábitos alimentarios recomendables, qué hacer cuando les salen los dientes y les provoca dolor o cómo se tienen que cepillar.
Una vez acabada la charla, realizaron una revisión odontológica individualizada a cada niño o niña. En los casos necesarios, entregaron a las madres una derivación al Centro de Atención Promaria (CAP) o al Hospital Odontològic Universitat de Barcelona, ubicado en el Campus de Bellvitge. En este último caso, el alumnado de la Facultad de Odontología atenderá a los niños y niñas del Casal dels Infants bajo la tutela del profesorado y por un precio reducido.
Durante la visita, Lara Concellón insistió especialmente en evitar el exceso de azúcar en la almimentación de los pequeños y pequeñas. “El azúcar no sólo provoca caries. También desajusta nuestro sistema. Para digerirlo, gastamos muchas energías y minerales que podrían aprovechar mejor nuestros huesos”.
La odontopediatra señaló que es necesario no dejarse confundir por la publicidad de ciertos productos que aparentan ser saludables y no lo son. También recordó a las madres que la prevención odontológica está cubierta por el Servei Català de la Salut, con servicios como las revisiones, la fluorización, las exodoncias (quitar una muela o un diente) y el sellado de fisuras.
En Vincles y Minúscula ya se trabaja para que los niños y niñas adquieran unos hábitos alimentarios saludables: “Para desayunar no pueden traer productos azucarados, como zumos artificiales o bollería. El grupo de los mayores, que va de los 18 a los 36 meses, tiene que traer obligatoriamente una pieza de fruta fresca”, explicó Andrea Arias, la educadora del proyecto.