Niños, niñas, jóvenes, familias del Casal dels Infants del Raval se juntaron con participantes de otras entidades la tarde del 24 de noviembre en la rambla del Raval para protestar colectivamente contra las condiciones en las cuales se encuentra el barrio y proponer estrategias y actividades conjuntas de mejora, con el objetivo de recuperar los espacios públicos y que estos estén limpios y seguros para que los vecinos y vecinas puedan disfrutar.
Las condiciones en las cuales se encuentran muchos espacios del Raval a menudo son motivo de noticia, pero en pocas ocasiones cuentan con la perspectiva de la infancia y adolescencia que viven en el barrio. El acto “Diem prou!: 1a Sentada para la recuperación y cuidado del barrio”, celebrado cuatro días después del Día Universal de la Infancia, fue un ejercicio de participación y visibilización de los niños y niñas del barrio, que han hecho oír su voz, acompañados también de jóvenes, familias y equipo de las entidades donde participan.
Aproximadamente unas 300 personas asistieron a la Sentada, entre niños, niñas, adolescentes, familias, vecinos, vecinas y otros agentes del barrio. La Sentada ha estado organizada por los niños, niñas, adolescentes y equipos educativos que forman parte del Proyecto Infancia Raval (PIR): AEI Raval, el Casal dels Infants, la Fundación Gavina y la Fundación Pere Tarrés.
Durante la Sentada, niños, niñas y adolescentes, con el acompañamiento de sus educadores, han afirmado estar “hartos y hartas” de la situación en la cual se encuentra el barrio y han denunciado las condiciones insalubres de las plazas y las calles, en un manifiesto que recoge la voz de los y las participantes y nace de un proceso participativo y de trabajo en red para mejorar el barrio. “Hay gente durmiendo, consumiendo drogas o alcohol… Estamos cansadas de encontrarnos cacas de perros y humanas, jeringuillas, preservativos, cartones, muebles y objetos personales abandonados” denunciaron Liza y Wilbel, del Centro Abierto Adolescente (COA) del Casal dels Infants del Raval, leyendo el manifiesto.
Aparte de la suciedad, los niños y niñas también se quejaban de la inseguridad que sienten por las calles donde pasan cada día y a los parques donde juegan por las tardes. “Queremos caminar tranquilos y tranquilas por las calles, queremos jugar sin miedo a recibir un golpe de un desconocido o de pincharnos con alguna jeringuilla, queremos un barrio seguro y limpio” continuaba el manifiesto.
Para ayudar a transformar su barrio, los niños y niñas han reclamado acciones para mejorar el Raval, como ayudar a las personas sin techo, tener más espacios verdes, más contenedores de reciclaje y pistas de juego abiertas a todo el mundo, y han pensado propuestas de actividades conjuntas para contribuir a cambiar las condiciones actuales del barrio, como plantar árboles o hacer una recogida de plásticos que se encuentran en la calle y pesarlos.
En la Sentada también se expuso un mural colectivo fijo en la rambla del Raval, donde se recogían con fotografías aquellas cosas que no les gustaban del barrio, cuáles les gustaría que cambiaran y mejoras, para documentar y reflectir el estado de insalubridad en que se encuentran muchas calles y plazas del barrio y, así, reivindicar la implicación de todos los servicios necesarios para encontrar soluciones y mejoras a estas problemáticas.
El Consejo de Participación de Infancia y Adolescencia
Previamente a la Sentada, los niños y niñas y educadores y educadoras de las entidades del Proyecto Infancia Raval (PIR) se reunieron en el Consejo de Participación de Infancia y Adolescencia para debatir, de manera adaptada a las necesidades y capacidades de cada edad, las demandas y propuestas que los delegados y delegadas habían recogido del resto de compañeros y compañeras de sus grupos.
El 3 de noviembre, 16 niños y niñas y adolescentes entre los seis y diez-i-siete años se juntaron en el Casal de Barri Folch i Torres para compartir que no les gustaba del barrio, como les gustaría encontrarse el barrio y proponer actividades y acciones conjuntas para ayudar a cambiar a mejor el barrio. Durante el Consejo, se señaló la suciedad, la masificación de turistas, la falta de pistas de deporte públicas, entre otros, y las situaciones que les generan inseguridad entre las calles que son su casa, como son las peleas, el racismo policial, y los espacios y calles mal iluminados.
Haz posible que continuemos acompañando y apoyando a niños, niñas, jóvenes y familias en situación de vulnerabilidad.
Haz voluntariado. Infórmate aquí.
Haz un donativo aquí.