La inserción laboral es el proceso necesario para que una persona pueda conseguir un empleo y forjarse una carrera profesional. Cuanto más se acerca el empleo conseguido a las habilidades y expectativas profesionales de la persona, mejor y más satisfecha se siente ésta a nivel personal y profesional.
En este artículo os explicaremos qué es la inserción laboral, a quién van dirigidas las acciones de inserción laboral, cuáles son las formas de inserción laboral y cómo es el proceso de integración laboral para los colectivos en riesgo de exclusión.
¿Qué es la inserción laboral?
La inserción laboral comienza desde el mismo momento en que una persona decide buscar empleo. Este proceso, en el que la persona conseguirá un trabajo y se integrará en el mercado laboral, es la inserción laboral. Se incluyen en la inserción laboral la presentación a candidaturas, participar en procesos de selección haciendo entrevistas, las prácticas profesionales o acabar consiguiendo un empleo.
Para una buena inserción laboral es importante mantenerse siempre al día, actualizando los estudios y conocimientos y aprendiendo cosas nuevas, para adaptarse al mercado de trabajo que está en constante cambio y evolución.
¿A quién van dirigidas las acciones de inserción laboral?
Las acciones de inserción laboral se dirigen a las personas que están buscando empleo.
Los colectivos a los que se suelen destinar estas acciones son:
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Personas desempleadas: Son esas personas que están buscando trabajo activamente y pueden necesitar apoyo para encontrar las oportunidades laborales adecuadas para ellas.
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Jóvenes: Las personas jóvenes que acaban de terminar sus estudios o que por primera vez van a incorporarse al mercado laboral, pueden acceder a programas de inserción laboral específicos. Estos programas les ayudarán a adquirir experiencia y nuevas habilidades.
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Personas en riesgo de exclusión social: Las personas en situación de vulnerabilidad se encuentran con dificultades añadidas a la hora de encontrar trabajo, y por eso es conveniente que cuenten con algún tipo de apoyo para poder conseguirlo.
¿Cuáles son las formas de inserción laboral?
Las principales formas de inserción laboral, a menudo dirigidas a las personas jóvenes, son los contratos de formación y las prácticas profesionales. Los contratos de formación combinan la formación con un empleo remunerado, y las prácticas permiten adquirir experiencia laboral en un entorno real, pero no suelen ser remuneradas.
Otras formas de inserción laboral son las ayudas para nuevos emprendedores, que buscan fomentar la creación de nuevos negocios apoyando a las personas que inician un proyecto.
Los programas para personas en riesgo de exclusión social, que las ayudan a obtener un empleo, son otra forma de inserción laboral.
¿Cómo es el proceso de integración laboral?
El proceso de integración laboral es el proceso a través del cual la persona se preparará, conseguirá un empleo y se adaptará a él. Este proceso consta de diferentes etapas.
En la etapa de orientación se informa a la persona sobre las oportunidades laborales que existen y que pueden encajar con sus habilidades e intereses profesionales. A continuación, se pondrá el foco en que la persona pueda adquirir nuevas competencias profesionales, en la etapa de formación.
La búsqueda de empleo es otra de las etapas del proceso de integración laboral. En ella se da apoyo a la persona preparando el currículum y las entrevistas, e identificando las oportunidades que pueden serle de interés.
La última etapa del proceso es la integración en el entorno laboral, que busca que la persona se integre de manera efectiva en el equipo de trabajo al que se acaba de incorporar.
El proceso de integración laboral para las personas en riesgo de exclusión
La inserción laboral para colectivos en riesgo de exclusión es fundamental para promover la inclusión social y la igualdad de oportunidades. Las personas en riesgo de exclusión social se enfrentan a más obstáculos y tienen más dificultades para encontrar un trabajo, y por eso se necesitan medidas específicas para facilitar que se incorporen al mercado de trabajo.
Los programas de formación y capacitación para estos colectivos son adaptados a sus necesidades. Siempre es importante que los programas de formación se adapten a las capacidades y contexto de cada persona, pero en el caso de las personas en situación de vulnerabilidad es imprescindible un enfoque personalizado, que comprenda y tenga en cuenta las circunstancias de cada persona.
Para llevar a cabo estos procesos, las personas en riesgo de exclusión pueden apoyarse en organizaciones y entidades especializadas en la inclusión social, como el Casal dels Infants. A través de nuestros programas de formación e inserción, como Superant Barreres, del que te hablábamos en esta notícia, proporcionamos orientación, recursos y apoyo a personas en riesgo de exclusión para facilitar su inserción en el mercado laboral.
La inserción laboral de las personas en grave situación de vulnerabilidad social les ayuda a adquirir competencias, experiencia y a mejorar su situación económica, pero también les ayuda a mejorar su autoestima y la confianza en ellas mismas. Las empodera y las hace volver a sentirse parte de una sociedad que a menudo las estigmatiza y las deja de lado.
Ayúdanos a seguir facilitando la inserción laboral de las personas en riesgo de exclusión.
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