No hay nada tan creativo como pensar una historia y convertirla en un cortometraje con la ayuda de los compañeros. Esto es lo que están haciendo los chicos y chicas del taller de audiovisuales del Espacio Tecnológico Comunitario del Casal en el barrio de Llefià de Badalona. Ya la han comenzado a grabar y le han puesto por título «Aprovecha cada momento», para concienciar a otros jóvenes sobre la necesidad de «vivir intensamente cada instante». Todo un ejemplo de trabajo en equipo y de voluntad de salir adelante!
Los participantes del taller son chicos y chicas de entre 15 y 20 años, del Casal Jove de Badalona-La Betsaida, que eligieron hacer esta actividad con mucha motivación, asegura la educadora responsable del espacio tecnológico, Marta Roda. El proceso de creación es participativo -todos intervienen- y ellos se ocupan tanto del guión como del rodaje. Van introduciendo cambios a medida que les surgen dudas y nuevas ideas -añade Marta-.
«Las chicas y los chicos tienen una actitud muy positiva y lo han querido reflejar en el cortometraje», continúa . “Aprovecha cada momento» explica el cambio de mentalidad de un joven que ve como su vida da un giro de un día para otro y esto le hace reflexionar sobre si el trato que ha tenido con sus compañeros es el adecuado. Los chicos saben que su trabajo puede ser una herramienta de transformación y concienciación social muy potente para otros jóvenes y se sienten muy satisfechos con lo que han hecho. «Nadie les ha impuesto lo que tienen que decir o como lo tienen que decir y eso les da una libertad y una seguridad difícil de conseguir en otros ámbitos». Para Marta, el cortometraje está siendo todo un éxito y el objetivo es consolidar y ampliar el número de participantes con más jóvenes del barrio.
De manera muy parecida a su hermano gemelo de Badalona, el Espacio Tecnológico del Raval tiene en marcha un grupo de reporteros «Media-TIC» que trabajan los temas de actualidad que más les interesan de su barrio. Además, su trabajo se difunde con mucho éxito en la red y sirve para «ayudar a que otros jóvenes como ellos se interesen y se impliquen al mismo nivel en la vida de barrio, mientras explican sus inquietudes», concluye el educador del proyecto en el Raval, Marc Pascual.